Olvidaros del envolvente título en inglés que tiene. Aún mucho más de la sinopsis, la cual no tiene prácticamente nada que ver con la peli (eso os lo garantizo). Y quedaros, sobre todo, con mi más que mosqueante rosco que le doy, y mi destructiva (por bien merecida) crítica. Vamos por partes: La peli dura, 87 eternos minutos. La he visto hasta sus mismos créditos finales, así que sé de lo que hablo. Esta película (por llamarla de alguna manera) es una auténtica tomadura de pelo. Y lo digo de manera literal. Es super surrealista. Pero no os engañéis. Ya que una cosa es el surrealismo y otra muy distinta, algo que carece de lógica alguna (como es el caso de ésta). Y claro está; para edulcorar algo este esperpento pues ya llegados a su último cuarto, te meten algo de terror convencional (como ese demonio que se aparece de vez en cuando, y demás) y ya se creen que han cumplido. Y de paso, también tienen en cuenta que el resto del planeta que ve cine de terror, somos gilipollas... Y venga, otra más (y ya van muchas últimamente) que no será recordada por absolutamente nadie. De hecho, es que no habrá ni dios que la termine de ver al completo. Porque es que resulta casi imposible poder siquiera hacerlo, de lo malísima que es. Y quién crea que exagero, pues lo tiene facilísimo. Está a tiro de piedra para poder visionarla. Empezar a verla y después me contais...
Gilles De Rais
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Olvidaros del envolvente título en inglés que tiene. Aún mucho más de la sinopsis, la cual no tiene prácticamente nada que ver con la peli (eso os lo garantizo). Y quedaros, sobre todo, con mi más que mosqueante rosco que le doy, y mi destructiva (por bien merecida) crítica. Vamos por partes: La peli dura, 87 eternos minutos. La he visto hasta sus mismos créditos finales, así que sé de lo que hablo. Esta película (por llamarla de alguna manera) es una auténtica tomadura de pelo. Y lo digo de manera literal. Es super surrealista. Pero no os engañéis. Ya que una cosa es el surrealismo y otra muy distinta, algo que carece de lógica alguna (como es el caso de ésta). Y claro está; para edulcorar algo este esperpento pues ya llegados a su último cuarto, te meten algo de terror convencional (como ese demonio que se aparece de vez en cuando, y demás) y ya se creen que han cumplido. Y de paso, también tienen en cuenta que el resto del planeta que ve cine de terror, somos gilipollas... Y venga, otra más (y ya van muchas últimamente) que no será recordada por absolutamente nadie. De hecho, es que no habrá ni dios que la termine de ver al completo. Porque es que resulta casi imposible poder siquiera hacerlo, de lo malísima que es. Y quién crea que exagero, pues lo tiene facilísimo. Está a tiro de piedra para poder visionarla. Empezar a verla y después me contais...
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